¡RETIRAR A RUSIA DE VENECIA!

El 24 de febrero de 2022, el Estado ruso lanzó una invasión a gran escala no provocada de Ucrania. Esta agresión sumió a un país de 41 millones de personas en los horrores de la guerra: bombardeos, ataques de artillería, invasiones de tanques y ataques aéreos contra objetivos civiles, así como ciberguerra y manipulación de los medios de comunicación. Estos actos injustificables se producen tras la anexión ilegal de Crimea y la ocupación de las regiones de Donetsk y Luhansk, en el este de Ucrania, en 2014, durante las cuales se permitió amablemente al gobierno ruso y a sus representantes culturales seguir participando en la comunidad artística internacional.

Una cómoda compartimentación ya no es sostenible, no cuando las ciudades ucranianas están siendo bombardeadas, los pueblos y aldeas están ardiendo, los niños tienen que pasar sus días en refugios antibombas y más de 368.000 ucranianos han cruzado la frontera como refugiados en tan sólo los primeros cuatro días de la guerra. Entre estos últimos, múltiples grupos marginados se enfrentan a una discriminación adicional en las fronteras. Sin que se vislumbre el fin del terror, y con millones de personas sacrificando sus vidas para resistir la ocupación rusa: las cuestiones de la guerra y la cultura se vuelven inseparables.

Por lo tanto, exigimos que las organizaciones artísticas adopten un boicot a la participación del Estado ruso en el ámbito cultural internacional, incluyendo la desinversión de las fuentes de financiación que se originan en Rusia, hasta que el Estado ruso se retire completamente de Ucrania, incluyendo Crimea y el este de Ucrania. En concreto, exigimos que:

1. La Bienal de Venecia emite un comunicado en el que suspende la participación de Rusia hasta que se retire totalmente de Ucrania.

2. La Tate emite una declaración en la que suspende la representación de Rusia en el “Comité de Rusia y Europa del Este” hasta que se retire completamente de Ucrania, comprometiéndose a disolver y reconfigurar el Comité a través de una lente anticolonial

3. Las organizaciones artísticas renuncien a la financiación y a las asociaciones con las fundaciones fundadas por los oligarcas del Estado ruso, entre las que se encuentran V-A-C Zattere/Moscú, el Museo de Arte Contemporáneo de Garaje, el Instituto Strelka, el Centro de Arte Contemporáneo Winzavod e instituciones independientes que apoyan al Estado ruso, como TZVETNIK, hasta que emitan declaraciones explícitas contra la intervención y el colonialismo.

La falta de acción decidida de la comunidad artística internacional está costando vidas ucranianas inocentes. Nos solidarizamos con los esfuerzos de los activistas dentro de Rusia para resistir la guerra de Estado. Es nuestro deber mostrar que estamos unidos frente a la despiadada agresión expansionista.

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